Ars Outplacement

La nueva vida laboral que se abre después del outplacement

Cuando las empresas, por diferentes circunstancias, se ven abocadas a realizar ajustes de personal para garantizar su supervivencia, los principales afectados son los trabajadores que se ven implicados en el proceso. Se ven obligados a iniciar una nueva carrera profesional y deben lidiar con la incertidumbre propia del desempleo y con las demandas cambiantes del mercado para iniciar una transición hacia un nuevo empleo. Porque, aunque es cierto que el trabajador es responsable de su propio desarrollo profesional y de mantenerse actualizado, la actualización de las competencias suele ceñirse a los aspectos clave para el desempeño de un trabajo. De modo que se olvidan otros elementos fundamentales para continuar presente en el mercado. Conocer cuáles son las tendencias del mercado laboral en el que se desenvuelve y cómo encajan sus habilidades en él, puede ser complicado para las personas que han desarrollado gran parte de su carrera profesional en un mismo puesto de trabajo. Estas personas en el momento que deben reorientar su carrera se encuentran, probablemente, con un mercado laboral que nada tiene que ver con el que conocían cuando empezaron en su empleo. En estas circunstancias, la mejor alternativa es inscribirse en un programa de outplacement para obtener la orientación de expertos en la transición laboral El outplacement como servicio de asesoramiento para una transición de carrera profesional exitosa. Las empresas deben ir más allá de preocuparse únicamente por asumir los costes económicos propios de la finalización de las relaciones laborales. Deben asegurarse de dar a sus exempleados las máximas oportunidades para que puedan reincorporarse al mercado laboral. Al participar en un programa de recolocación, los trabajadores obtienen asesoramiento profesional personalizado de la mano de expertos en búsqueda de empleo. Durante el proceso se define el objetivo principal del programa y se estudian todos los factores que influyen en la empleabilidad del trabajador. Así, se descubren tanto puntos de concordancia en entre las demandas del mercado laboral como oportunidades de mejora que se pueden explorar para mejorar el perfil profesional. Además, proporciona formación en técnicas de búsqueda de empleo adaptadas a la era digital y se ofrece apoyo emocional para resolver todas las inquietudes que surjan a lo largo del programa. Pero, sin duda, una de las partes fundamentales del proceso de outplacement es el asesoramiento enfocado a la construcción y mantenimiento de la marca personal del trabajador,de forma que destaque entre el resto de los candidatos y quede en la memoria de los reclutadores y expertos del sector. Una vez que el trabajador tiene claro qué imagen quiere proyectar en el mercado y cómo hacerlo, se le proporcionan una serie de contactos y eventos en los que poner en marcha las habilidades de networking adquiridas durante el proceso. Los procesos de recolocación tienen una duración máxima de un año, que puede ampliarse hasta los dos, y finalizan cuando se completa la transición laboral de forma exitosa, es decir, cuando el experto encargado del proceso termina el seguimiento de la incorporación del trabajador en su nuevo puesto. ¿Qué dicen los datos? Los resultados avalan la eficacia de los programas de recolocación para minimizar los efectos de los despidos. Las competencias que se adquieren durante el proceso optimizan el tiempo de búsqueda de empleo. Un trabajador que no participa en este tipo de programas tarda Una media de 14 meses en encontrar trabajo, mientras que en torno al 80% de los participantes en programas de outplacement, consiguen trabajo en un plazo menor a los 6 meses. Además, quienes preparan su transición de carrera con ayuda de expertos parecen tomar conciencia de lo que puede aportar con sus habilidades, pero también de que debe actuar de forma proactiva y constante para mejorar su empleabilidad. No en vano, muchos de ellos consiguen acceder a oportunidades laborales con mejores condiciones que las que tenían en la empresa anterior. Como conclusión, podemos decir que los programas de recolocación convierten los procesos de transición profesional, generalmente traumáticos; en procesos orientados al éxito con una metodología clara, liderados por expertos y que requieren que el trabajador se implique activamente. Estas tres características tienen como consecuencia la reducción de la incertidumbre en el trabajador y una búsqueda de empleo más eficiente. Si tu empresa debe llevar a cabo ajustes de personal y quieres trabajar con especialistas en  recolocación laboral, contacta con nosotros y te informaremos de nuestros planes personalizados para facilitar una transición de carrera exitosa a tus empleados.

El despido y el proceso de recolocación posterior 

despido y recolocación

Enfrentarse a un despido supone un cambio traumático en la vida del trabajador ya que el empleado necesita activar los mecanismos de afrontamiento y de adaptación disponibles a su alcance para minimizar el impacto de la nueva situación laboral en su bienestar.   Sin embargo, las reestructuraciones de personal tampoco son inocuas para las empresas. Su gestión impacta directamente en el clima laboral y en la satisfacción profesional de quienes se quedan en la empresa.   Con el objetivo de minimizar estos efectos colaterales, las organizaciones han cambiado la manera en la que abordan la finalización de las carreras de los empleados dentro de la empresa. Su tramitación ha pasado de considerarse un gasto a planificarse como una inversión.  Además, el despido ha evolucionado en su definición, de un modelo estático que solo abarcaba la finalización de la relación laboral «empresa-empleado» y el arreglo de los trámites burocráticos que conlleva, a convertirse en un proceso activo de acompañamiento del empleado en todos los pasos necesarios hasta su reincorporación a un nuevo puesto de trabajo.  El outplacement: el proceso de despedir y acompañar hasta recolocar  Las empresas, como parte de la sociedad, se desenvuelven en un entorno dinámico, con el objetivo de adaptarse a esos cambios. En los últimos, han ido adoptando estrategias de gestión del fin de las carreras profesionales en la organización orientadas a la recolocación del talento en otras empresas.   Según el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores las empresas de más de 50 trabajadores están obligadas a ofrecer un plan de recolocación o outplacement a sus empleados cuando se realice un ERE.  Este servicio debe ser implementado por una empresa externa, impidiendo que la finalización de la carrera laboral se lleve a cabo únicamente mediante un acuerdo con los trabajadores afectados.  Su duración suele extenderse de los 6, la duración mínima que marca la Ley, hasta los 12 meses, si bien la media está en torno a los 9 meses; si fuera preciso, se puede alargar hasta los 2 años.   Fases del proceso de recolocación Primera fase. Estos procedimientos comienzan con una evaluación del punto de partida, es decir, se debe conocer qué motiva al empleado en esta nueva etapa, cuáles son sus intereses, qué habilidades ha adquirido y qué competencias ha desarrollado durante su carrera profesional. Pero también cuáles son las oportunidades que le ofrece el mercado y qué aspectos debería mejorar para facilitar el cambio de empleo. Una herramienta muy utilizada delante esta fase es el análisis DAFO.  La segunda fase comprende la definición de los objetivos profesionales en base a los resultados del análisis de la fase anterior. Esta fase puede tener tres resultados diferentes: continuar la carrera profesional en posiciones similares a las que se han desempeñado, romper con su carrera profesional cambiando de sector y actividad, o dirigirse hacia el autoempleo.  En la tercera fase, conociendo la situación de partida y los objetivos finales se elabora un plan de acción para conseguirlos. Durante esta etapa se forma al trabajador para optimizar sus habilidades en la búsqueda de empleo, trabajando todos los aspectos que pueden influir en ella, desde adecuar su marca personal y habilidades en networking, por ejemplo, hasta la adquisición de nuevas habilidades y competencias que demanda el mercado laboral.  La cuarta fase es la búsqueda activa de un nuevo empleo tanto por parte del trabajador como por parte de la empresa encargada del proceso, poniendo en práctica los aprendizajes adquiridos durante la formación.  La quinta y última fase, es el seguimiento del empleado. Este se lleva a cabo una vez se ha logrado la recolocación laboral con el objetivo de acompañar y evaluar al empleado durante la integración en su nuevo ambiente laboral.  Cabe destacar que, durante todo el proceso de cambio de empleo, se deberá brindar al trabajador apoyo psicológico con la finalidad que mantenga la confianza en sí mismo y mitigar en lo posible las consecuencias del despido en su bienestar personal.  En conclusión En resumen, el proceso de recolocación posterior al despido se podría condensar en brindar apoyo emocional al empleado, conocer la situación de partida, definir bien los objetivos, trazar una hoja de ruta para lograrlo, poner en marcha las acciones necesarias para cumplir dicha hoja de ruta, y hacer un seguimiento de la situación del trabajador o trabajadora una vez consiga los objetivos planteados.  Un proceso de desvinculación de los empleados de la organización bien desarrollado beneficia a todas las partes implicadas. Para los trabajadores mejora su empleabilidad y la efectividad en la búsqueda de empleo, lo que se traduce en una reducción del periodo de recolocación. Y, para las empresas, mejora el clima laboral, añade valor a la marca corporativa y reduce la conflictividad laboral.  Durante 2021, en ARS Outplacement logramos que un 92% de los participantes en nuestros programas se reincorporaran al mercado laboral en un periodo medio de cuatro meses, y el 80% ha conseguido un salario superior o igual al del puesto anterior. Además, hemos superado nuestro compromiso de generación de oportunidades de empleo, y el 60% de los participantes en nuestros programas desarrollan su trabajo en funciones similares a las de puestos anteriores.  Si tu empresa debe poner en marcha un ERE y quieres trabajar con especialistas en recolocación laboral, contacta con nosotros y te informaremos de nuestros planes personalizados que facilitarán la desvinculación laboral y el inicio de nuevos caminos. Nuestros resultados nos avalan.   

¿Conoces las 12 competencias más valoradas por las empresas?

competencias valoradas

Los responsables de recursos humanos de una empresa se enfrenta día a día a la necesidad de reclutar profesionales capaces de cumplir con su tarea de forma eficiente, además de que esté alineado con los objetivos y la cultura de la empresa; debido a esto, las competencias profesionales son cada vez más valoradas y demandadas, yendo mucho más allá de un título académico.   Pero ¿a qué nos referimos cuando hablamos de competencias profesionales más valoradas?  ¿Qué son las «competencias profesionales»?  Estas competencias profesionales tienen que ver con la capacidad, habilidades laborales, actitudes y conocimientos necesarios que permitan a la persona trabajadora desempeñar las tareas y características propias de un puesto de trabajo o de trabajos diversos.   Según indica la tercera edición del Informe sobre el futuro de los trabajos del Foro Económico Mundial, el mercado laboral se va transformando aceleradamente y las personas trabajadoras deberán invertir en su formación continua y actualizada porque de esta manera aumentará su empleabilidad (opciones de empleo) e, importante, a la par disminuirá el tiempo de espera.   Un desafío que se puede convertir en tu gran oportunidad  En los próximos cinco años muchos de los trabajos actuales se están transformando debido a la introducción de la tecnología en sus procesos, y será preciso que las personas trabajadoras que ocupen esos puestos desarrollen competencias digitales y transversales, contextualizadas en esos mismos entornos digitales.   La formación continua y personalizada es la mejor opción para la recolocación, y el outplacement es una forma de ayudarles a ello. Adquirir nuevas competencias es esencial si quieres destacar en el océano de candidatos existente en el mundo laboral. Acrecentar tu desarrollo profesional es activar e impulsar tus opciones de encontrar empleo o cambiar de trabajo. Y aquí es donde el outplacement te ayuda en la adquisición de nuevas competencias y a desarrollar y potenciar las ya existentes, a la vez de acortar los tiempos de espera.   Es cierto que cada rol profesional precisa de unas habilidades específicas, sin embargo, también deberemos contar con las competencias profesionales transversales, es decir, aquellas que son generales y necesarias en todo tipo de empleo, como las que te detallamos a continuación.  Las 12 competencias profesionales más valoradas y demandadas  Mentalidad de crecimiento: es decir, buscar un desarrollo constante, siendo capaz de enfrentarse a nuevos retos y con visión de futuro. También se conoce como growth mindset.  Aprendizaje constante. Tus acciones y tus palabras muestran las ganas de aprender, la curiosidad de preguntar a compañeros, de realizar cursos o mentoring en la empresa, aunque también es importante la capacidad de aprender tecnologías, programas y sistemas nuevos que te permitan avanzar e impulsar tu desarrollo profesional creciendo con la empresa.   Productividad. Esencial aprovechar el tiempo al máximo, es decir, siendo puntual, cumpliendo los tiempos de entrega, optimizar recursos, pero siempre sin descuidar el bienestar.  Pensamiento crítico. No dudes en ser una persona analítica y cuestionar procesos, dinámicas de grupo y metas, buscando soluciones e ideas que acorten los tiempos y recursos, aumentando eficacia y eficiencia, vital para las empresas.  Creatividad e iniciativa. No se trata solo de proponer ideas, sino también de comunicarlas y de saber poner en marcha planes de acción que permitan controlar y medir resultados, saliendo de tu zona de confort.    Trabajo en equipo. La capacidad de colaboración con tus compañeros y compañeras de trabajo es imprescindible en algunos entornos, como en el teletrabajo, por ejemplo, explicando herramientas de reparto de tareas o comunicación utilizados para ello. Una comunicación clara y concisa es importante.   Decisiones en base a datos: Saber utilizar la información te permite reconocer oportunidades y elegir las más adecuadas para invertir recursos (dónde y cómo), siempre orientado a maximizar los resultados y eficacia posible.    Flexibilidad y resiliencia. Es la capacidad de adaptarse a nuevas herramientas, nuevos entornos o nuevas situaciones y aceptar cambios de estructura en los equipos.   Gestión del estrés. Es decir, saber trabajar bajo la presión de fechas de entrega, objetivos y procesos a realizar, así como el mantener la calma y la paciencia en situaciones de crisis.  Compromiso. Las empresas buscan personas trabajadoras con sentimiento de pertenencia a la empresa y que reflejen y ase alineen con sus valores, siendo capaces de cumplir objetivos propuestos.  Relaciones interpersonales. Si los contactos personales pueden facilitarte estar en contacto con alguna oferta de empleo, aceptar a los demás con sus defectos y cualidades, ser empático y dejar de lado chismes y críticas crean siempre buen ambiente laboral, lo que te permitirá mayores opciones dentro y fuera de la empresa.  Habilidades digitales. Incorporar habilidades y capacidades digitales engloba desde ser capaz de realizar una videollamada y ser productivo de forma remota, hasta aprender cómo funcionan los nuevos programas o herramientas. Ser proactivo para adaptarse continuamente a las nuevas necesidades en el mercado laboral.   En definitiva, el camino por recorrer dependerá de ti. Elegir orientación laboral y outplacement para realizar una buena formación continua te permita adquirir otras competencias profesionales más valoradas, impulsar tu desarrollo profesional y ampliar así tus opciones de empleabilidad, ya sea para encontrar empleo o porque quieras cambiar de trabajo.  

Desarrolla tu carrera profesional y mejora la empleabilidad

empleabilidad

En este artículo te comentamos qué es «la empleabilidad», por qué van unidas tu carrera profesional y tu empleabilidad y, muy importante, ocho consejos que te ayudarán a mejorar ambas y cambiar así tu futuro laboral.   A qué nos referimos cuando hablamos de «empleabilidad»  La pandemia ha tenido consecuencias muy importantes en el mercado laboral, no solo en la pérdida de puestos de trabajo, sino también en la aceleración de la transformación digital.    Primero veamos qué es la «empleabilidad»: el conjunto de aptitudes y actitudes que permiten a una persona encontrar un trabajo, conservarlo y adaptarse a los cambios del mercado.    La posibilidad de empleo puede ser de dos formas:    Interna: cuando tus habilidades y capacidades están alineadas con los objetivos y necesidades de tu empresa.   Externa: la relación que se establecería entre todo lo que tú aportas y las necesidades (y objetivos) del mercado laboral.   Por tanto, hablaremos de mejora de la empleabilidad cuando la persona cuente con las habilidades y los conocimientos que se requieran en un puesto específico, ya sea de forma interna o externa.    Esta (empleabilidad) es tu valor añadido, lo que te permitirá destacar al dar visibilidad a todo aquello que te convierte en un candidato idóneo o una candidata idónea.   Empleabilidad y desarrollo profesional van unidos  La capacitación y la formación continua son esenciales para avanzar e impulsar la carrera profesional, destacando los aspectos positivos, pero también mostrando la motivación, visión y enfoque que dicha persona tiene.   Cuando hablamos de recolocación o de outplacement deberemos tener claro lo esencial, el objetivo: impulsar el desarrollo profesional para acrecentar la empleabilidad, ya que no podemos obviar que ambos se complementan y van unidos.   No olvides que estamos en un mercado laboral en constante cambio, por tanto, para mejorar tu futuro laboral deberás primar tu formación continua para adquirir otras habilidades y capacidades necesarias, además de impulsar las ya existentes, lo que te aportará un plus añadido a la hora de presentar tu candidatura.    A continuación, nos vamos a centrar en aquellas habilidades y competencias que pueden impulsar la mejora de la empleabilidad, a través de varios consejos que te ayudarán a ello.   8 consejos para mejorar tu empleabilidad  Dado el poder cambiante e inseguro del entorno laboral, las personas que quieran tener opciones en él deberán actualizar y, sobre todo, aumentar sus habilidades blandas, competencias técnicas y tecnológicas, tanto las específicas de un puesto como las transversales, ya que éstas pueden ampliar las opciones laborales, abriendo oportunidades, ya sea a la hora de encontrar empleo o para cambiar de trabajo, rol profesional, sector…    Sin olvidar, como decíamos, que tanto unas como otras se pueden adquirir en tu puesto de trabajo, participando en proyecto, a través de una formación continua, y que contar con esta formación solo depende de ti.  Estos son los 8 consejos:    Formación continua: clave para tu desarrollo profesional ya que te permite estar al día de lo que demanda el mercado actual.   Capacitación en habilidades técnicas y tecnológicas: te permiten trabajar con tecnologías disruptivas: Cloud Computing, la inteligencia artificial, el Machine Learning o el Data Science.   Soft skills o habilidades blandas: necesarias para desenvolverte en entornos ágiles. Habilidades como la creatividad, el trabajo en equipo, la innovación, la responsabilidad, el pensamiento crítico, la sociabilidad, la comunicación efectiva…  Trabajar en equipo fomentando un ambiente de trabajo colaborativo, productivo y eficiente.   Comunicación: debes contar con una buena comunicación verbal, no verbal y digital para saber transmitir bien una opinión y defender tus puntos fuertes, así como para posicionarte en el mercado y transmitir de forma adecuada tu perfil laboral, objetivos y logros profesionales.   Flexibilidad: adaptarse a los cambios tecnológicos en la empresa o a los nuevos roles profesionales que se necesiten en esta es esencial, y esto se logra con formación continua.   Organización, planificación y gestión del tiempo. Es preciso conocer herramientas como las agendas laborales o calendarios, los planes de acción…, para establecer prioridades y gestionar bien el tiempo, optimizando así este y siendo más productivos.   Proactividad: tener iniciativa para llevar a cabo actividades creativas, buscar alternativas, encontrar soluciones, sabiendo ser consecuente con ello y tomando decisiones sobre cómo actuar en cada momento.  En resumen, no lo dudes y ponte en manos de personas expertas en outplacement que te ayudarán de forma individual a desarrollar tus habilidades y mejorar tu empleabilidad, diseñando estrategias y proporcionándote herramientas que te ayuden en la búsqueda de empleo o de nuevos retos profesionales, logrando así que seas más visible en el actual mercado laboral, y disminuyendo tu tiempo de búsqueda.  De hecho, en estos momentos son los profesionales que transforman la información en conocimiento los que están ganando terreno.    Recuerda, todo aquello que te permita conectar con el mercado laboral actual y, sobre todo, con aquellas empresas o puestos en los que tú quieras estar, será lo que te lleve a una mejora de tu empleabilidad.  Si buscas mejorar tu empleabilidad recuerda que en Ars Outplacement disponemos de un catálogo de sesiones formativas impartidas por nuestros consultores expertos y que te ayudarán a conseguir tu objetivo profesional. 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Outplacement: cómo funcionan los programas de recolocación

Definición de outplacement El outplacement nace en Estados Unidos, en los años cuarenta, después de la Segunda Guerra Mundial, para atender a los soldados. Pero no será hasta los sesenta cuando James E. Challenger, fundador de la consultora Challenger, Gray & Christmas, quien lo denomine así. ¿Por qué en los sesenta? Porque estaban en un momento difícil de cambios y restructuraciones, donde técnicos, científicos y militares fueron despedidos de la NASA. Fue entonces cuando el ejercito y la NASA comenzaron a utilizar estrategias de outplacement para paliar las consecuencias de estas desvinculaciones. Como es obvio, con el tiempo se fueron profesionalizando y dando lugar a los programas que hoy conocemos. En España llegará en los años ochenta, un momento difícil de cambios debidos a la reconversión industrial. En definitiva, los programas de recolocación y Outplacement constan de una serie de estrategias de apoyo, orientación psicológica y técnica dirigidas a las personas con una desvinculación laboral, con el objetivo de minimizar el impacto del despido, a la par de orientar a la persona para que sepa aprovechar sus fortalezas, definiendo objetivos y planificando su carrera laboral de manera eficiente y exitosa. El papel de las agencias de recolocación Estamos hablando de un servicio externalizado al que la legislación actual obliga a la empresa cuando pone en marcha un ERE.  Según los datos que aportan las agencias, el 97% de los trabajadores que participan en estos programas se incorpora a otras empresas. El 70% encuentra un nuevo trabajo en un plazo no superior a los seis meses y, en solo tres meses, el 26%. El papel de las agencias de recolocación o de outplacement es esencial porque ayuda a: reducir la conflictividad en los despidos y mejora el clima laboral mantener la responsabilidad social corporativa (compromiso humano y ético) reforzar el trabajo del departamento de RRHH, ya que es el encargado de llevar todo el peso, incluso a nivel emocional. potencia la imagen de marca para la empresa (el talento en las empresas u organizaciones es un activo dinámico) Además, son conscientes del tacto, sensibilidad y empatía necesarios para realizar su labor. Cómo funciona un programa de recolocación Outplacement significa literalmente «colocar fuera» y su servicio consiste en el proceso de recolocación o reubicación de una parte del personal de la organización en otras empresas, de acuerdo con su perfil profesional y su plan de carrera. Esta labor se realiza a través de 5 fases: Evaluación de la situación: en esta primera fase es imprescindible llegar a un clima de confianza en el que poder entender y acompañar a la persona, lo que permite delimitar el perfil, así como las actitudes, motivaciones y personalidad del profesional. Definición de objetivos: una vez conocida la situación se definirá el target profesional. Así, en unos casos se continuará con un trabajo similar, en otros se dará un enfoque diferente o, incluso, el afectado se puede plantear el trabajar por cuenta propia. Plan de acción o programa: una vez determinados los objetivos y las oportunidades, llega el momento de abordar un plan de acción de búsqueda de empleo. Definiendo para ello prioridades, planes y estrategias acordes con los objetivos Búsqueda activa de un nuevo empleo: se activa todo lo trabajado anteriormente. La consultora y el trabajador un inician una prospección de empresas y ofertas, a la par que se siguen revisando y actualizando perfiles, estrategias y objetivos, conjuntamente con el trabajador Un nuevo camino: una vez reubicado el trabajador, la agencia realizará una labor de seguimiento puntual para valorar el grado de integración y satisfacción del trabajador. Duración La duración media de los programas es de 9 meses, aunque el periodo suele oscilar entre los tres y los doce meses; si bien, también hay métodos que se podrían alargar hasta los veinticuatro meses. 5 factores clave para un proceso de outplacement exitoso Conoce las necesidades de tus colaboradores. … Empodera a los colaboradores y líderes en el proceso. … Diferencia el tipo de población a la que se va a dirigir. … Escoja una empresa de outplacement que sea flexible y pueda adaptarse a su cultura organizacional. … Cree un equipo de trabajo. Clases de programas de recolocación Las agencias cuentan con planes de recolocación grupales e individuales. Actualmente, la tendencia está llevando al uso de planes individuales para todos, tanto los mandos como los trabajadores, realizando actividades grupales que fomentan la motivación del grupo, los contactos, las sinergias y la optimización de recursos en aquellas áreas que afectan a todos. No obstante, en nuestra compañía disponemos de hasta cuatro tipos de programas: Legal, en el que la empresa se limita a un nivel de apoyo adaptado exclusivamente al marco legal Estándar: en el que la empresa cuenta con planes sociales que ofrecen apoyo según los perfiles de los profesionales Avanzado: en el que la empresa cuenta con planes sociales que ofrecen apoyo adaptado a cada persona. Individual: cuando la empresa cuenta con planes sociales o despidos colectivos que ofrecen apoyo adaptado a las necesidades de cada persona. A lo largo del artículo hemos visto cuán importante es contar con una agencia de outplacement y un buen Plan de Recolocación en el momento de la desvinculación. Si tu empresa se ve obligada a un ERE, no lo dudes, contacta con nosotros y te ayudaremos en la consecución de un Plan en las mejores condiciones, obteniendo un resultado óptimo.

Caso de éxito de nuestros programas de recolocación

A finales de 2018 una multinacional del sector retail moda, se pone en contacto con nosotros porque tiene la necesidad de ofrecer un plan de recolocación a sus empleados, saben que somos expertos en recolocación con reconocida experiencia en el sector retail y esto les ofrece la seguridad que necesitan. Después de sentarse con nosotros para conocer todos nuestros programas, deciden ofrecer a sus trabajadores un plan de recolocación con un compromiso del 65% de casos solucionados, es decir, en 6 meses nos comprometíamos a ofrecer una solución a más de la mitad de sus trabajadores. Comenzamos el programa en diferentes puntos de España, Cádiz, Málaga, Asturias, Bilbao y La Coruña. Gracias a nuestra alianza con Red Persona tenemos un alcance nacional que nos permite dar cobertura a toda España. En primera instancia, nos encontramos con grupos de personas más o menos afectadas por la pérdida de su empleo, que una vez que empiezan con nosotros van sintiendo que tienen posibilidades reales de reincorporarse al mercado, tanto en su sector como en otros diferentes que a priori desconocían. Dos meses antes de la finalización del programa, nuestro compromiso se ve superado en un 93,62%.  Gracias a nuestro trabajo de consultoría personalizada, a las ofertas captadas (161 sobre un compromiso de 159) y a la intermediación realizada, hemos conseguido, una vez más, dar solución a todas aquellas personas que han pasado por el programa, cumpliendo con creces los KPIs propuestos desde el inicio. ¿quieres conocer nuestros programas? arsoutplacement.com/#programas

Job crafting

La tecnología está consiguiendo que la eficiencia de todo proceso económico sea cada vez más elevada, sin límite aparente, y colateralmente desarrollando un conjunto nuevo de comportamientos sociales.  En este caldo nos encontramos cuando se nos ocurren, digo correctamente, se nos ocurren, impactantes aseveraciones del tipo, “lo único que permanece es el cambio”, “el cambio es geométricamente acelerado”, etc.… Pues, en estas reflexiones ando yo, que me llevan a confirmarme, que sobre el único elemento que podemos actuar, en estos momentos de incertidumbre y transformación, es sobre el ser humano, más allá, incertidumbre, niebla y fiarse de los indicadores, ¿serán correctos o responden a otros principios de partida? Pregunta: ¿de qué depende nuestra empleabilidad o la empleabilidad de las personas de nuestros equipos de trabajo?  El “Job Crafting” como muchos otros, más o menos, novedosos conceptos, trata de dar respuesta a los entornos que hoy nos vamos encontrando.  El modelar nuestro puesto de trabajo, con las implicaciones que para el bienestar y, por ende, para el compromiso y productividad tiene, parte en esencia de como enfoque, yo y no los otros, la carrera profesional. En las siguientes líneas voy a hacer un recorrido de la responsabilidad que cada uno de nosotros tenemos para convertirnos en escultores de nuestro puesto de trabajo, de nuestra carrera profesional, en definitiva de nuestra empleabilidad y lo haré siguiendo los principios expresados por Pat Rocchi en su libro “The Six P’s of  change” Nos enseñan, y no lo terminamos de aceptar, aunque lo empezamos a tolerar, que la manera de alcanzar un objetivo, cualquiera que sea, es la de planificar y pensar como lo vamos a conseguir, no simplemente actuar. Un paso más profundo es prepararnos psicológicamente para abordarlo. En el diseño de nuestra carrera profesional, cada día es una oportunidad, estemos corriendo, o estemos en el banquillo, preparándonos para correr. Celebra cada día Por mucho que nos empeñamos en aprender algo, por ejemplo, una técnica nueva que nos hace más eficaces, si ésta no está alineada por nuestro propósito, con el origen de nuestra pasión por algo, carecemos una y otra vez en la no consolidación de esa técnica aprendida. Cuando nos proponemos diseñar nuestro presente y futuro profesional es necesario partir de lo que me apasiona, (ya habrá tiempo de analizar las oportunidades, el mercado y validar así el plan) No se trata de ser “naíf” sino de empezar la casa por los cimientos Revisa tu pasión y concéntrate en ella Es cierto que existen los ingenios legos, pero no es lo habitual, lamentablemente. Cuando nos ponemos a diseñar nuestra carrera profesional, partiendo del punto donde nos encontremos, es muy recomendable aprender, no hacerlo sólo como un proceso aislado. Trabajemos en un equipo, formemos un equipo, recopilemos la experiencia de otras personas y luego decidamos como enfrentar el reto. Apóyate en todos los recursos que tengas al alcance, para pensar y reflexionar Una vez que sabemos dónde vamos, lo que queremos, empecemos a trazar el camino. Para ello, usemos las herramientas más sencillas y probablemente más útiles que todo ser humano debe conocer. Las agendas. Cuando vas a alcanzar el objetivo, que puntos de revisión se establecen para analizar tu desviación, cómo sabrás si es viable o no, que pasos estas dando y como considerar que son adecuados, qué tiene que ocurrir para darles esa cualidad. Fija y establece cada paso que des. Es un proceso, igual que estudiar una carrera universitaria o que alcanzar una cifra de ventas en la empresa Enfocar el desarrollo profesional de una manera “profesional” significa no considerarlo una tarea al margen. Igual que como mánager de una función determinada el liderazgo que se ejerce sobre los equipos no es una tarea al margen, está intrínsicamente ligado a la consecución del objetivo que se persigue. El tiempo es relativo, en el sentido de que lo utilizamos de una manera o de otra. En cualquier caso, tú eres el responsable de esa decisión sobre su uso. ¿Cuán prioritaria es tu carrera profesional? ¿En qué orden de consumo de tiempo se encuentra respecto a todos los demás consumidores? Tiempo Destina el tiempo con el que te has comprometido y hazlo de manera eficaz. La carrera profesional es un camino hacia un fin deseable y controlable por cada persona. El incentivo, la recompensa o el beneficio que nos mueve está claro en nuestro plan (si no hubiese beneficio nos costaría avanzar, de ahí la importancia de diseñar y planificar nuestra carrera) También es importante que en el camino exista el incentivo. En una carrera ciclista sería la meta volante o el premio de la montaña.  Estos incentivos son tan o incluso más importantes cuando nos encontramos en un momento del desarrollo profesional donde nuestro objetivo inmediato es incorporarnos a la “carrera” Los premios, incentivos, recompensas o beneficios pueden ser de muchos tipos, los que primeros identificamos son los económicos, pero también existen gratificaciones de otros tipos, tantos como tipos de personas somos Incentívate, cada paso que das para alcanzar el siguiente hito de tu plan de carrera profesional debe de corresponderse con un éxito y debes celebrarlo Ejecutar las acciones del plan de carrera profesional son un trabajo en sí mismo. Cualquier actividad humana se desarrolla más fácilmente con un buen desarrollo físico y mental.  Toda acción parte del conjunto de emociones que cada uno sentimos y éstas se ven afectadas por la condición física, además de por nuestro modelo mental. El plan de carrera profesional es desarrollado por una persona, en toda su amplitud conceptual, luego la situación física y anímica en importante. Nutre tus emociones, gestiónalas. Tu mente es tan importante como tu cuerpo El camino no se hace sólo, al alcanzar tu objetivo compártelo, sé parte del desarrollo profesional de otras personas, apoya sus planes de carrera, impúlsalas. Aunque sientas que el camino lo has hecho sólo, esto solo es tu percepción (revisa tu modelo mental) pues el éxito solo se consigue en relación con los demás. Las relaciones humanas son los lazos que te permitirán pisar … Leer más

Conclusiones 1º desayuno “Potenciando la empleabilidad”

Desde Grupo persona hemos cumplido con nuestra promesa del pasado mes de Noviembre. Tras la presentación del Informe sobre empleabilidad, que publicamos a finales del 2018, nos propusimos avanzar y profundizar en algunos de los aspectos que en el informe ya avanzamos que están influyendo en la misma. Decidimos comenzar profundizando en cómo la Transformación Digital está influyendo en la empleabilidad de los empleados y cómo las empresas se están adaptando a esta nueva Era. Para ello iniciamos nuestro ciclo con un doble impacto: un primer desayuno debate, “Transformación Digital y Empleabilidad” y un podcast de RRHH Digital “La voz de RRHH”. En ambos tuvimos la fortuna de contar con Directivos de Recursos Humanos que pusieron encima de la mesa interesantes opciones e ideas sobre los pasos que las empresas ya están dando para adaptarse a esta etapa de cambios. Uno de los puntos que más preocupa a las empresas actualmente es la retención del talento, inquietud que transmitieron empresas tecnológicas presentes en el debate, que hablaron de la dificultad a la hora de retener perfiles muy tecnológicos y más jóvenes donde el salario ya no es un elemento de retención. En este caso, la flexibilidad en el horario, la posibilidad de teletrabajar, la facilidad de formarse en el puesto de trabajo,… son alternativas que los Departamentos de RRHH deben incorporar en su ADN, y aún así la mentalidad y motivaciones de estos trabajadores hace que no se sientan igual de fidelizados a las empresas y que valoren otras fórmulas de trabajo que les permitan “ser dueños de su destino”, como ya se puede escuchar en algunas entrevistas de trabajo. Uno de los ejes principales del debate, fue la preocupación por desarrollar líderes en entornos digitales. Esto nos lleva a desaprender cómo se han gestionado los equipos hasta ahora, para aprender a liderar equipos diversos en entornos de transformación digital, entendiéndolos no desde el punto de vista de la diferencia de edad sino de las diferentes mentalidades y estados de experiencia. La clave de la diversidad es tener toda clase de mentalidades, lo que enriquece a las personas, los equipos y las empresas. Asistentes al desayuno de sectores tan diversos como el tecnológico, retail, industrial o transporte comentaron sus experiencias en programas enfocados a desarrollar líderes en entornos de Transformación Digital y programas de Alfabetización Digital. Todo ello, no deja de redundar en una mejora en la empleabilidad de los empleados, capacitándoles a trabajar en los nuevos modelos de trabajo que se imponen en esta nueva Era, como son los entornos colaborativos. En el Programa de Radio, los asistentes sacaron a la palestra cómo en los departamentos de RRHH cada vez se trabaja con más datos e información y como la Inteligencia Artificial empieza a formar parte ya de algunos procesos, como es el caso del reclutamiento, donde entran en juego complejos algoritmos de predicción. Pero aquí aparece el otro lado de la moneda, y es la preocupación de dejar en manos de una máquina decisiones tan importantes como quién entra a formar parte de la organización. Aquí se hace patente la necesidad de encontrar el equilibrio entre máquina y persona, y no dejarnos deslumbrar por la Tecnología. Una interesante reflexión quedó en el aire ¿somos nosotros los que manejamos la tecnología o son las máquinas quienes nos manejan a nosotros? También empiezan a surgir algoritmos que “avisan” del riesgo que existe de que una determinada persona abandone el barco, y aquí entra en juego la responsabilidad del líder y de RRHH, que son quienes deben gestionar la situación. De estas reflexiones surge otra: estamos en el mundo de la imaginación, y el hombre es el único que puede jugar, engañar e imaginar, lo que nos diferencia del resto de animales y por supuesto de las máquinas. Este es un punto diferencial y que nos permite que seamos nosotros los que “engañemos” y, por tanto, controlemos a la máquina. Empiezan a parecer profesiones relacionadas con la Transformación Digital como las que van vinculadas a la Cyberseguridad, uno de los perfiles que más se demanda en esta nueva Era. No nos olvidemos de algo importante: los “arquitectos” de las máquinas seguiremos siendo las personas. Por tanto, aprendamos de las nuevas herramientas como el Big Data para poder gestionar a las personas dentro de las organizaciones, pero conozcamos cada vez más de ellos, sin perder de vista el factor humano. Una de las principales conclusiones es que no hay ningún sector que pueda ser ajeno a los cambios que la nueva Era Industrial impone, y ningún profesional puede cerrar los ojos a los mismos, o su empleabilidad puede verse mermada de cara a, las no ya tan futuras, demandas del mercado.

“ESTO SIEMPRE SE HA HECHO ASÍ” QUEDA OBSOLETO EN LA ERA DIGITAL

Era digital

Seguro que más de uno piensa… pero, ¡cómo! ¿otro post sobre Transformación digital? ¿Y por qué no? Sabemos que se ha escrito mucho sobre ello y sabemos que se va a seguir escribiendo, porque no podemos ser ajenos a algo que está influyendo en nuestras vidas en todos los aspectos, ya que afecta no solo a los procesos de la vida personal y profesional, sino a nuestra forma de pensar. ¿Y por qué al Grupo Persona le interesa la Transformación Digital? Sencillo, porque es uno de los aspectos que más está influyendo y va a influir en los próximos años en la empleabilidad de las personas, y esa es precisamente una de nuestras pasiones, acompañar a las personas en sus respuestas ante los retos que su profesión le pone en el camino, y a las compañías a desarrollar equipos eficientes y con capacidad para adaptarse a los continuos cambios en los que muchas ya se ven, o se van a ver, inmersas. El pasado mes de Noviembre desde el Grupo Persona publicamos nuestro informe sobre empleabilidad, en el que hacíamos un recorrido sobre la evolución de la misma y compartíamos con vosotros las principales conclusiones que nuestro estudio arrojaba, y que tenéis disponible en el siguiente enlace http://dp.hpublication.com/publication/2239553a/mobile/. En este sentido, ya dedicamos un apartado a cómo la transformación digital influye en la empleabilidad. Pero intentando no repetirnos e ir más allá de lo que ya se ha dicho y comentado sobre la nueva Era Digital, permitidnos una pregunta: ¿Es la Transformación Digital la causa de los cambios en nuestra forma de pensar y actuar o han sido dichos cambios los que han llevado al punto en el que estamos actualmente? Las anteriores revoluciones industriales, que estudiamos en los libros, se produjeron por necesidades concretas y tuvieron consecuencias importantes para la sociedad: por ejemplo, la revolución industrial trajo consigo una mayor conciencia de clase, la adquisición de derechos laborales y la consolidación del estado del bienestar; la revolución tecnológica permitió una mayor automatización en los procesos de trabajo, lo que implicó la destrucción de empleo, pero a la vez la eliminación de esos puestos de trabajo permitió dar más valor al  conocimiento y que este se vea como elemento indispensable en el trabajo. Como decía, otras revoluciones industriales las hemos estudiado en los libros, pero actualmente la Revolución Digital la estamos viviendo en primera persona. Aparentemente, esta nueva Era, llega con un ritmo y una celeridad en los cambios que parece obligarnos a desarrollar algunas capacidades que antes no eran tan necesarias en el mundo profesional, como la flexibilidad y la capacidad de adaptarnos. P. ej. Nuestros abuelos, y muchos de nuestros padres, se jubilaban en la misma empresa en la que entraban a trabajar de jóvenes. En cambio, actualmente rara es la persona que va a trabajar siempre en la misma compañía, bien por decisión propia o bien por otras causas. Hasta no hace mucho, normalmente te mantenías en tu puesto muuuuchos años sin excesivos reciclajes o formaciones extra pero actualmente, si no nos mantenemos muy al día en las nuevas herramientas, tecnologías y técnicas, nos quedamos obsoletos en muy poco tiempo. Pero,… ¿realmente la Transformación Digital es la que nos lleva a tener que ser más flexibles, inquietos, innovadores, con más capacidad de comunicación,  o son los cambios en nuestra forma de pensar los que nos han hecho provocar esta situación y el entorno adecuado para que esta transformación se produzca? Gracias a la rapidez con la que trabajan las nuevas tecnologías, que ya surgen en la revolución tecnológica, le dimos más valor al conocimiento, y este se democratizó, quisimos que fuera más accesible para todos, queríamos tener información en tiempo real y estar más conectados, los procesos cambiaron, se agilizaron y un larguísimo etc. Todo eso, unido a los avances tecnológicos, parece que ha sido el caldo de cultivo ideal para la 4ª y, según muchos, la 5ª revolución industrial. Por eso la famosa frase que muchos hemos escuchado en más de una ocasión “esto siempre se ha hecho así”, ya no tiene validez. Y si me permitís, hace mucho que dejó de tenerla. Es importante que tomemos conciencia de que las personas curiosas, innovadoras, que se adaptan a los cambios y se muestran flexibles, tienen más opciones de moverse mejor en esta revolución que nosotros hemos provocado, que estamos viviendo y que vamos a vivir porque son personas que se preparan, se anticipan y muestran una actitud positiva ante los cambios, ya que, en lugar de verlos como amenazas, los ven como oportunidades de crecimiento y desarrollo. Y esto es así, porque son ese tipo de personas las que han hecho posible que la Transformación Digital tenga lugar, y forme ya parte de nuestras vidas. Queremos destacar que la Transformación Digital en la que estamos inmersos no trata solo de desarrollos tecnológicos cada vez más avanzados, sino que afecta a cómo las personas afrontamos estos cambios y nos adaptamos a los mismos. Por supuesto no podemos ser ajenos a que aquellos que no somos nativos digitales, necesitamos realizar cierto esfuerzo para estar al día. Pero no solo se trata de hacer 8 másteres y 15 cursos de especialización, sino que debemos pararnos y reflexionar sobre qué tipo de profesionales somos y qué tipo de profesional queremos ser dadas las demandas actuales del mercado. ¿Qué necesitamos cambiar y qué es lo que ya tenemos que nos sirve? Las nuevas profesiones y las nuevas titulaciones van a requerir de profesionales preparados técnicamente hablando, por supuesto, pero eso no significa que los profesionales que no nacimos con una Tablet debajo del brazo estemos fuera del mercado, ya que somos precisamente los que hemos hecho posible que estemos en el momento actual.  Los llamados nativos digitales sienten que cierta tecnología siempre ha estado ahí, pero la realidad es que para tener ahora un Iphone último modelo, ha sido necesario que hace 45 años Martin Cooper inventara el primer móvil cuando trabajaba en Motorola.  Por tanto, son las personas con … Leer más

¿Qué tiene en común el vino y el outplacement?

[:es] Existen claras afinidades entre dos ámbitos en apariencia tan distintos como la elaboración y comercialización del vino, y la prestación de servicios de outplacement. La globalización ha sido un factor decisivo para el replanteamiento de la actividad vitivinícola, que ha implicado la imposición de criterios estandarizados en la elaboración del vino. El terruño, los matices del clima y el buen hacer del enólogo han dado paso a una comercialización mainstream estandarizada, en la que la producción ya no se cuenta por botellas si no por hectolitros. Los matices se diluyen en busca de la fruta + madera y el rasero lo ponen prescriptores internacionales como Robert Parker y su varita mágica del éxito.   Y es que cuando se apela al paladar de millones de personas, es necesario encontrar el mínimo común denominador para “agradar a todos” y aplicar ese criterio a la producción industrial. La estandarización del producto prevalece sobre la variación del clima del año, o las particularidades de cada productor.   Los grandes grupos empresariales de producción vinícola abren centros de producción en las denominaciones con más gancho comercial y dan uniformidad a la producción; así pueden seguir proveyendo ese mínimo común denominador, encorsetado por los designios de políticas globales marcados por su central.   El resultado es que cuando entramos en un supermercado de Madrid, de Toulouse, de Boston o de Christchurch, nos encontramos en un alto % con las mismas botellas de vino… vinos muy decentes, por cierto, los que surgen de este entendimiento del negocio. En paralelo, hay una serie de productores locales que no sólo defienden las particularidades de sus suelos, su clima y su saber hacer, si no que lo emplean en salir de esa visión del mínimo común denominador para llevar su vino a otro nivel de personalización y calidad.   Imagina por un momento que pudieras viajar por el mundo con un enólogo experto que te dijera en cada lugar el vino de mayor calidad y personalidad, aquel que te hace conectar con la esencia de los rincones y valores de las gentes de esa tierra, que te permitiera conocer mejor las sutilezas que hacen único ese lugar respecto al resto del planeta. Pues bien, ese enólogo experto en la actividad del outplacement es Arbóra Global Career Partners. Al igual que ocurre con el vino, la manera de entender el outplacement varía entre estas dos corrientes: definir el mínimo común denominador y aplicar políticas internacionales estandarizadas con mayor rigidez en su adaptación local, o la apuesta por un conocimiento profundo de lo local usado en favor de una experiencia cliente de mayor calidad.   Frente a las multinacionales de la actividad de outplacement, Arbóra cuenta con socios expertos en outplacement en 35 países, que conocen el terruño y adaptan el método de producción al clima de cada cosecha. En Arbóra Global Career Partners somos “vinateros locales asociados” con una máxima compartida: la experiencia cliente y su bienestar para mejorar sus oportunidades de mercado. Somos 35 empresas con décadas de experiencia en el outplacement de valor añadido y una coordinación internacional que nos permite abordar proyectos de toda envergadura, con la seguridad de que allá donde vayas, tendrás el vino que ofrezca perfecto maridaje, adecuado a tu momento y tu necesidad.   “Arbóra, the career organisation with global reach and local passion.” [:]

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