Cuando la situación se impone. Es hora de potenciar nuestras habilidades.
“Un guerrero debe aprender a hacer que cada acto cuente, pues va a estar aquí, en este mundo, tan solo un tiempo breve; de hecho, demasiado breve para ser testigo de todas las maravillas que existen”. Castaneda, C. (1998) La Rueda del tiempo. New York: Gaia Café, atasco, reunión, llamada, comida en 30 minutos, otra llamada, una formación, atasco y, así pasan los días, esperando a que llegue el fin de semana para después volver a empezar. Vamos tan rápido que no hay tiempo de nada y… de repente un día… “STOP” ¡El mundo se para! Parece una película de ficción, pero la situación que vivimos en este momento nos ha dejado a todos en casa sin poder salir. En este momento, todos acabamos de unirnos con un objetivo y una esperanza común: encontrar la vacuna y la cura del coronavirus y acabar cuanto antes con lo que nos está pasando. De pronto, sentimos la amenaza tan de cerca que tenemos miedo por nuestros familiares, amigos y por nuestra propia vida. Íbamos tan rápido que apenas mirábamos a la amenaza que se cebaba contra China y más tarde con Italia. No hemos parado ni levantado la vista hasta el último minuto. Hasta que nos han parado. Es ahora, cuando llevo 7 días sin poner un pie en la calle, cuando paro, cojo perspectiva y valoro y analizo la situación. Todo lo que nos está sucediendo es tan valioso para poner en práctica en tu vida personal y profesional… Estos son los puntos que estoy encontrando y que no quiero olvidar, para poder seguir trabajando en ellos desde ya, en mi empresa y en mi vida personal: La unión que hemos hecho entre todos, la ayuda y los gestos de cariño con todas esas personas que tenemos cerca y damos por hecho. ¿no has dicho en estos días más veces “Te quiero”? Tenemos un objetivo común de vital importancia y por el que todos nos sacrificamos. Trabajar en equipo siempre es más fácil. El cuidado de nuestros mayores los más débiles en este momento, pero tan valiosos por toda su experiencia Valorar los esfuerzos y la confianza de mi empresa sobre sus equipos, las ganas de tirar para adelante unidos todos juntos El humor y optimismo que compartimos todos con nuestros móviles y bromas Los diferentes roles que vamos adoptando a lo largo de la cuarentena. Psicólogo, cocinero, maestra, árbitro, El apoyo que sentimos en esta montaña rusa por la que pasamos. Nos animan y animamos cuando más lo necesitamos. La capacidad de adaptación a situaciones de cambio casi inimaginables y tremendamente rápidas. Y tú, ¿Qué harás cuando salgas? Yo ya he empezado.