[:es]Permitidme que os cuente una historia…
… para entender como empecé a recorrer mi camino.
Llegar hasta aquí, me ha supuesto recorrer otros caminos previos, y descubrir que cuando llegas al destino, nuevas sendas se abren ante ti.
“Hace tiempo descubrí que necesitaba un cambio profesional, un proyecto que me re ilusionara, necesitaba volver a sentir la pasión por lo que hacía día tras día y, dando pequeños pasos, lo encontré: acompañar a otras personas a que encuentren, o reencuentren, sus pasiones profesionales o vean nuevos caminos a recorrer, a romper los bloqueos y barreras que yo misma había tenido, pero que me había costado tanto romper. Descubrí que, durante toda mi trayectoria profesional anterior, me había ido preparando para este momento, casi sin saberlo”.
Paré, reflexioné, detecté cuál era mi sueño, y analicé qué tenía y qué me faltaba para cumplirlo. Y todo gracias a que alguien me hizo las preguntas adecuadas.
Mi experiencia no es única, y probablemente, ni siquiera sea especialmente original. Muchos otros han pasado por ese momento en el que de repente te asaltan preguntas o reflexiones del tipo, “¿qué hago en este trabajo si no me gusta?”, “¿dónde está mi ilusión de hace años?”, “Sólo vengo a trabajar por el sueldo”, y tantas otras…
Pero no haces nada por cambiarlo, ¿quizás porque te da miedo dejar la seguridad de lo conocido?, ¿tal vez porque crees que ya no es momento de cambiar y te acomodas?,…
¿Te ves reflejado en estas preguntas?
Hay ocasiones, en que sin querer cambiar tu proyecto profesional, son otros los que deciden por ti, y llega la tan temida desvinculación de la empresa (despido, ERE,…), y es ahí donde nos vemos obligados a CAMBIAR.
En mi historia se unieron ambas situaciones, desmotivación y falta de ilusión en lo que hacía, y ese empujón que de repente llega en forma de Despido Colectivo. Y entonces, llegan los miedos, la tan temida ansiedad, las inseguridades, los “qué hago yo ahora”, todos ellos normales y lógicos en una primera fase del Proceso, pero no me quedé ahí.
Vi una oportunidad de reinventarme y de quererme de nuevo como profesional, y en parte fue gracias a que alguien, como ya he apuntado antes, me hizo las preguntas adecuadas: “¿Qué es lo que no has hecho y te hubiera gustado hacer, pero que no has podido por el trabajo que tenías?”, “¿Cuáles son tus sueños?”,” ¿cómo puedes alcanzarlos?”, … Con este tipo de preguntas llegué al mundo del Outplacement y del Coaching, primero como usuaria de un programa de recolocación, después como alumna de Orientación Laboral y del mundo del Coaching, y finalmente como profesional de la que hoy es mi profesión, donde ahora soy yo quien hace las preguntas adecuadas que permiten a otros a avanzar en su camino, superando sus miedos y cambiando esas creencias que les limitan a alcanzar su nuevo proyecto, en un momento de transición profesional.
El cambio es posible y, si bien influye la gestión que cada uno haga y los pasos que dé para conseguirlo, estar y sentirte acompañado por profesionales en ese proceso, es un apoyo que día a día veo como ayuda a otros a avanzar hacia su objetivo profesional, donde en muchas ocasiones son las emociones las que entran en juego y nos pueden limitar, o frenar a conseguirlo… Pero eso, querido lector,…formará parte de la siguiente historia…
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Enhorabuena Ana, lo que cuentas tiene mucho mérito, le solemos dar el nombre de “salir de la zona de confort” y eso te hace más… persona.
Hay gurúes que predican que los cambios se consolidan repitiendo la nueva conducta, hasta que queda incorporada. Pero… ¿Qué ocurre cuando está incorporada? (llámalo conducta, acción, pensamiento, habilidad, etc…) pues simplemente que nos permite algo nuevo y nos impide otras cosas. El secreto está en lo que has hecho, saber que quieres y dudar de lo que haces, y para ello solo hay que tener CURIOSIDAD y GANAS. El futuro es tuyo